Mi hijo me ha enviado esta imagen para mí tan familiar de Marcel la tortuga desde su tortugario en Tenerife. y la quiero compartir con ustedes para hacerlos sonreir.
Junto con Juana su compañera, han despertado de su letargo del invierno - ya que ahora están en primavera - y viven atentas -si tienen hambre - al movimiento que hay en el lugar donde se encuentran. Los dos meses que estuve en Tenerife, yo era la encargada de alimentarlas, así que en cuanto escuchaban mi voz, enseguida trataban de llamar mi atención asomándose a la orilla y muchas veces lo hacían con demasiado entusiasmo y caían para el piso quedando con las patas para arriba, ¡era muy gracioso!.
Donde uno las ve, con esa parsimonia que las caracteriza, ellas tienen sus gracias y dan a entender sus necesidades llamando nuestra atención para ser atendidas ya que "TODOS SOMOS UNO"y nos necesitamos unos a los otros.
Un abrazo a todos y cada uno.
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