Dios no para de crear frente a la insensatez del hombre que día a día va destruyendo su propia casa, el planeta Tierra que lo contiene y sostiene desde que fue puesto en ella.
En su ambición y falta de conciencia contamina aire, suelo y agua, y Él, para defendernos del efecto del recalentamiento global creó en los mares un ejército de SALPAS.
Maravilloso el mundo animal,lo de la madre leona impresionante.Eso es realmente lo que se llama ser madre. Y parecerá mentira pero en el mundo de los humanos he vistomuchas veces la indeferencia de los padres en el amor y el arriesgarse por sus hijos.
ResponderEliminarAgradecida Hortelia por tan valioso tema. Besos